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Dirigido a aquellos que sienten que llevan una doble vida, para los confundidos y los reprimidos. Para quienes sienten que hay algo que aun no se ha revelado. Para los que intuyen que existe un lugar al otro lado del río, la montaña, la selva, la ciudad, la nacionalidad, la familia y la lógica tradicional. Para los que exploran y sienten que una manera de salvarse y crear es huir, aunque nunca se pueda huir de uno mismo. Para los que saben que en Colombia no solo se reprime al pobre, sino también al que se sale de las lógicas de una sociedad pequeño elitista que se cree liberal, pero que en el fondo esta enceguecida y enclaustrada en un recalcitrante conservadurismo parroquial.
Este es un mensaje de esperanza para los que aun pensamos que el mundo es largo y ancho: en algún lugar hay una rincón en el cual uno pueda encontrarse cómodo con uno mismo, aquí o allá, al final la respuesta esta dentro de nuestro largo y ancho mundo interior.
Este es un mensaje de esperanza para los que aun pensamos que el mundo es largo y ancho: en algún lugar hay una rincón en el cual uno pueda encontrarse cómodo con uno mismo, aquí o allá, al final la respuesta esta dentro de nuestro largo y ancho mundo interior.
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ResponderBorrarhay cosas así, que uno lee cuando debe, cuando por dentro de uno empiezan a susurrar, a hablar o a gritar. Ayer pensaba en algo que siento tan adentro de estas palabras suyas, y este algo se me despertó el martes, y hace rato no lo oía, y seguramente un mensaje que me llegó el otro día contribuyó a despertar esta sensación, esta sensación de estar descolocada, de que quizás mi verdad está en otro lado, o que, aunque esté dentro de mí, sólo en otro lado la podré encontrar, porque a veces hay que partir para encontrarse, o en realidad quizás lo que pasa es que aún no encuentro mi lugar en el mundo, o como diría un personaje de animé, aún no encuentro mi lugar favorito. Disculpe usted el largo de mi comentario, no sirvo para escribir cortico, pero... leer sus palabras fue como compartir un café y hablar de la vida y sentir que somos más que menos. Y tenía que hacérselo saber. Y eso sería todo.
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